Pedir agua con gas ha pasado de ser visto como un gesto extravagante a ser una tendencia e incluso «bien visto» como una alternativa sano para bebidas alcohólicas. Y como suele ocurrir con las tendencias, las afirmaciones de marketing sobre sus múltiples propiedades tampoco han tardado en aparecer. ¿Qué hay de cierto en eso? ¿Es realmente más saludable que beber agua del grifo?
Empecemos por el principio: ¿qué es el agua con gas?
El agua con gas no es más que agua con gas. Dióxido de carbono: el famoso dióxido de carbono responsable de las diminutas burbujas. Este gas se puede inyectar a presión pero en algunos casos también puede formar parte del líquido normalmente. En cuanto a su composición, contiene minerales como sodio, potasio y magnesio, al igual que su hermana el agua. Entonces, vale la pena repetirlo, es importante tener en cuenta que el agua con gas es solo eso: agua con gas.
¿Es cierto que te puede ayudar a perder peso porque es más saciante?
Se han hecho muchos estudios (aunque muy pequeños) sobre este tema, y lo que se ha observado es que al cuerpo le cuesta diferenciar entre las sensaciones de hambre y sed. No podemos confirmar que el agua con gas tenga un efecto directo en la pérdida de peso, pero es posible que al aumentar la sensación de saciedad y reducir la sed, pueda reducir la sensación de hambre, haciéndonos comer menos. Por un efecto mecánico, puede ayudar a la sensación de saciedad, principalmente porque las paredes del estómago se dilatan. ¡Y este es precisamente un dato que debemos tener en cuenta! Mientras que para algunos
Este efecto puede ser muy beneficioso para las personas, mientras que en otras puede provocar flatulencias. Por otro lado, las personas con hernias de hiato o algunos problemas gastrointestinales pueden sentirse consternadas de que estemos introduciendo un gas que desestabiliza sus «tripas» ya maltratadas.
¿Es cierto que beber agua con gas es malo para los huesos?
No, podemos estar tranquilos. Aunque algunos estudios han demostrado que ciertos refrescos, como la cola, están asociados con una menor densidad ósea, esto puede deberse al ácido fosfórico, no al gas.
¿Es posible que el agua con gas estropee los dientes?
no afortunadamente También podemos ser geniales con esto.. El agua con gas no representa un desafío para la salud dental. Desafortunadamente, no podemos decir lo mismo de los refrescos azucarados porque contienen ácidos y azúcares que pueden causar caries y erosión del esmalte. Ante la duda de si alguna bebida puede erosionar el esmalte, la mejor opción es beber a través de una pajita para evitar el contacto directo del líquido con la superficie de los dientes.
En resumen: agua con gas, ¿sí o no?
Al explicar que el agua con gas es simplemente agua con dióxido de carbono, es tan bueno que es una tendencia actual. Es una fuente de hidratación refrescante, si además la acompañamos con una rodaja de cítricos, resulta aún más de aperitivo, ya la hora de socializar puede sustituir a un refresco azucarado o incluso al alcohol. Si te gusta, adelante… PERO Sin asignar propiedades que no son de su propiedad. El agua del grifo para hidratarnos sigue siendo una opción inmejorable.